Hoy vamos a hablar sobre una de las plagas que tenemos que conocer. Cuando hablamos de araña roja nos referimos en realidad a un ácaro del género Tetranychus. Este ácaro, que se alimenta de plantas en ambientes secos, en España afecta sobre todo a la costa mediterránea, Extremadura y Canarias.
En la foto superior, puede verse el punteado claro que producen en la parte superior de la hoja. Viven en el envés de las hojas, donde la fina telaraña de seda que construyen crea un microclima idóneo para la reproducirse (protegidos del agua, acaricidas y depredadores).
A simple vista pueden verse los adultos, diferenciándose entre hembras y machos. La hembra tiene forma ovalada ovalada de 0,5 mm. por 0,3 mm. Es de color rojo-anaranjado (también amarillo y verde) con dos distintivas manchas oscuras laterales en el tórax; el macho es mas pequeño y estrecho, de color más claro. Los huevos se observan como diminutas esferas planas de color claro que se oscurecen a medida que maduran.
Este enemigo tan pequeño chupa la savia de las plantas, provocando la curvatura de las hojas que acabarán por secarse y caer prematuramente. Así, acabará mermando el crecimiento de la planta y la producción.
Para el control de esta plaga, el primer factor a tener en cuenta es conseguir una alta humedad aumentando el número de pulverizaciones de agua limpia sobre las plantas y revisando concienzudamente el envés de las hojas. Además, se pueden aplicar productos químicos específicos como son los acaricidas o, de forma más ecológica, introducir un depredador de este ácaro. El depredador más utilizado para el control biológico es Phytoseiulus persimilis. Existen otros depredadores como Amblyseius andersoni, Amblyseius californicus, Feltiella acarisuga y Macrolophus caliginosus.
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