Hiedra común - semillas

La hiedra común (Hedera helix) es apreciada por su capacidad para cubrir superficies verticales y trepar por muros y árboles, creciendo vigorosamente en condiciones de sombra parcial o plena luz solar. Sus hojas perennes y densas proporcionan un excelente refugio para la fauna silvestre y, una vez establecida, es una planta resistente que requiere poco mantenimiento. Es importante proporcionarle un suelo bien drenado y ligeramente ácido, evitando los suelos demasiado secos o encharcados.

En cuanto al riego, la hiedra común prefiere mantenerse ligeramente húmeda durante los períodos de crecimiento activo, reduciendo el riego en invierno cuando su actividad se ralentiza. Puede podarse para controlar su crecimiento y mantener una forma deseada, eliminando los tallos rastreros que se extienden demasiado. Aunque generalmente resistente a plagas y enfermedades, se debe estar atento a posibles problemas como ácaros o pulgones, especialmente en condiciones de estrés o falta de aireación.