¿Quién no ha probado los pimientos de Padrón en España?
Asados o fritos con aceite de oliva y sazonados. Los pimientos de Padrón algunos pican y otros no, como dice un refrán gallego. La variabilidad de su picor y su rico sabor lo ha popularizado y se pueden encontrar como tapas o acompañando platos en cualquier esquina. Su nombre proviene, como no, de su origen, el convento de San Francisco de Herbón, en Padrón (La Coruña).
Al pimiento de Padrón le ha salido un pariente al otro lado del planeta, un cultivar similar denominado pimiento Shishito. Como al gallego, algunos pican y otros no, pero frente al Padrón que pican entre el 10 y el 25% de los ejemplares, en este pican menos del 10%.
El pimiento de Padrón mide unos 5 cms y no más de 10 cms., son de color verde oliva, el Shishito es más alargado, estrecho y estrecho, también más arrugado, cuentan en Japón que su nombre procede de que la punta parece un león… algunas personas que lo han probado dicen que sienten la piel del Shishito un poco más gruesa al morder.
Las recetas con pimientos Shishito están más adaptadas a la cocina oriental, incluyendo ingredientes como la salsa de soja, el zumo de lima o mezclas de especias orientales.
Así es el aspecto del pimiento Shishito:
Aquí vemos los pimientos Shishitos cocinados:
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